Lo que comenzó como el sueño de un inmigrante originario del Valle de Lecrín que hizo fortuna en Canarias y transformó el antiguo cortijo de sus padres en una bodega, se ha convertido hoy en uno de los complejos enológicos más importantes de Granada: Hacienda Señorío de Nevada. Una bodega al estilo château francés, rodeada de sus viñedos y un hotel de 4 estrellas moderno, rompedor, pero en sintonía con el paisaje. Sus vinos son de los que más reconocimientos han obtenido de la D.O. Granada.
Bodegas Señorío de Nevada se fundan en 1996 y cuentan con una superficie de 21 hectáreas, extendiéndose a los pies de la Alpujarra granadina, a una altitud de 650 metros sobre el nivel del mar. Se encuentran ubicadas en una zona idílica para el cultivo de la vid, con terrenos ricos en minerales propios de la alta montaña y un microclima especial, debido a la extraordinaria combinación de los factores climáticos, propios de Sierra Nevada, el mar y los tres ríos que atraviesan zona.