Vino Tinto Finca Valdelroble
Vino Tinto Finca Valdelroble es un genial coupage de Bodegas Félix Callejo que combina variedades Tempranillo y Syrah. Vino Roble de V. T. Castilla y León.
93 Tim Atkin | 93 James Suckling
Edad: Roble
Bodega: Bodegas Félix Callejo
Elaboración: 12 meses en barrica de roble francés. Vino elaborado con uvas ecológicas.
Nota de cata para Vino Tinto Finca Valdelroble:
Color intenso, rojo vivo, denso, tiñe la copa de color y lágrimas.
Profundo y delicado aroma; flores silvestres, vientos del páramo que se mezclan con exóticas frutas maduras. Se perciben las entrañas de la roca caliza y de fondo especias y ahumados.
En boca recuerdos de la uva, tanino fresco, todavía por pulir, voluminoso y a la vez granuloso en el paso, se siente la madurez de la uva y al final largo en el tiempo.
Temperatura de servicio óptima: 12° C.
Un maridaje: Paletilla de cordero con setas.
Ingredientes: Una paletilla de cordero cortada en rodajas, 1 zanahoria, 1 cebolla, un surtido de setas (de temporada, en conserva o deshidratadas), harina, pimienta negra, aceite de oliva y un vasito de vino blanco.
Elaboración:
- Salpimentar la carne y enharinarla. Freírla en una sartén con el aceite de oliva y reservar.
- Picar la cebolla y la zanahoria, ponerla en una cazuela con el aceite de oliva y rehogar. Cuando esté bien rehogada, añadir el vino y dejar que el alcohol se evapore.
- Entonces, añadir un vaso de agua y cocinar durante 15 minutos más.
- Triturar para obtener una salsa y añadir el surtido de setas: si son frescas, solo hay que limpiarlas; si son en conserva, escurrirlas bien antes; y si son deshidratadas, hidratarlas antes en agua o vino blanco).
- Añadir los trozos de cordero reservados y dejar cocinar a fuego medio 30 minutos más.
¡Buen provecho!
Félix Callejo nace en Sotillo de la Ribera, dentro de una familia con una larga tradición en el mundo del vino. Tanto su abuelo Faustino, como su padre Félix, poseían viñedo, además de ser “corredores de vino”, una especie de agente comercial, encargado de vender las partidas de vino elaborado en Sotillo.
A los 16 años, tuvo que asumir las riendas del negocio familiar tras la muerte de su padre. Inquieto por naturaleza, siempre tuvo el sueño de elaborar su propio vino.
La recompensa llega en 1989, cuando sale a la luz la primera cosecha. Desde el principio su máxima ha sido la de dar a conocer la grandeza de nuestros vinos, haciendo viajes por todo el mundo, desde Japón hasta América, asistiendo a Ferias, contactando con nuevos clientes. Ha sido pionero, siempre con su botella debajo del brazo, al introducir los vinos de Ribera del Duero, en países donde apenas había cultura del vino.