Vino Tinto LZ
Vino Tinto LZ es un coupage que alinea a la perfección las uvas Tempranillo y Garnacha para crear un Tinto Joven de la D.O. La Rioja. Vino de sabor intenso en boca elaborado por Compañía de vinos Telmo Rodríguez.
89 Parker | 92 Peñín
Edad: Joven
Bodega: Compañía de vinos Telmo Rodríguez
Nota de cata para Vino Tinto LZ:
De color rojo cereza.
En nariz, fondo especiado, con recuerdos lácteos, aromas frutales.
En boca es intenso, limpio, refrescante, con mucha fuerza en boca típico de un buen vino joven. Con recuerdos a frutos rojos y ciertos toques amargos casi inapreciables pero deliciosos al paladar.
Temperatura de servicio óptima: 14° C.
Un maridaje: Pollo al curry.
Ingredientes: 2 pechugas de pollo deshuesadas, 2 dientes de ajo, 1 trozo de jengibre (2 cm. aprox.), 1 cebolla mediana, 1 tomate grande, 1/2 taza de leche de coco, 1 cucharada de curry en polvo, 1/2 cucharada de comino, 1/2 cucharada de cúrcuma, pimienta de cayena (opcional), sal, pimienta negra molida y aceite de oliva virgen extra.
Elaboración:
- Pica el pollo en cubos medianos. Corta la cebolla y el ajo también en cubos pequeños. Ralla el jengibre y tritura el tomate.
- En una sartén profunda, agrega un poco de aceite de oliva virgen extra y cocina la cebolla, el ajo, el jengibre y el tomate. A continuación agrega todas las especias, el curry, el comino, la cúrcuma, la pimienta de cayena, pimienta negra y una pizca de sal. Revuelve todo bien por un par de minutos y baja el juego a la mitad.
- Agrega el pollo picado y cocina hasta que se haya sellado bien. Pon 1/2 vaso de agua y mezcla. Deja que cocine a fuego suave durante unos 15 minutos, removiendo de vez en cuando.
- Agrega la 1/2 taza de leche de coco. Mezcla bien y deja cocinar 5 minutos más. Si quiere suavizar el sabor puede poner un poco más de leche de coco.
- Apaga el fuego y deja reposar un par de minutos.
Al servir, ponle unas hojas de cilantro fresco picado por encima a tu pollo al curry.
Lo ideal es que te comas este pollo al curry acompañado de arroz blanco recién hecho. Si es arroz basmati, mejor.
¡Riquísimo!
En 1994, Pablo Eguzkiza y Telmo Rodriguez junto con un tercer enólogo elaboran un vino de Garnacho, de viejas viñas en vaso de Navarra. El vino se llamó Alma. Así arranca el proyecto, que en sus orígenes se llamara Compañía de Vinos de La Granja. Un nombre que era toda una declaración de intenciones: quedaba claro que la compañía haría más vinos y que había un homenaje a La Granja, la famosa fábrica de vidrios, testigo de una artesanía española excepcional, hoy casi desaparecida.
Desde su nacimiento, el argumento fundamental de la Compañía de Vinos Telmo Rodriguez es la utilización únicamente de variedades autóctonas de zonas originales. Esta filosofía contrasta entonces con el boom de la implantación de variedades foráneas, prácticamente en todo el viñedo español.
Otra de las iniciativas a las que el proyecto quiere prestar una atención especial, también desde sus orígenes, es a la recuperación de viñedos olvidados.