Los vinos tintos son aquellos que se elaboran a partir del mosto de uvas tintas fermentado junto con las partes sólidas de la uva (hollejos y pepitas). Las sustancias aromáticas y cromáticas están en la piel de la uva, por lo que es necesario que esta macere en el mosto y le proporcione matices olfativos y color.
Los vinos tintos son aquellos que se elaboran a partir del mosto de uvas tintas fermentado junto con las partes sólidas de la uva (hollejos y pepitas). Las sustancias aromáticas y cromáticas están en la piel de la uva, por lo que es necesario que esta macere en el mosto y le proporcione matices olfativos y color.
Clasificación de los tintos según su crianza:
-Vino del año o “cosechero”: no tiene crianza en barrica. Se embotella tras el estabilizado y clarificado.
-Roble: menos de 6 meses en barrica y sin mínimo de redondeo en botella.
-Crianza: 18 meses de crianza, de los cuales al menos 6 en barrica y el resto en botella.
-Reserva: 36 meses de crianza, de los que al menos un año debe ser en barrica.
-Gran Reserva: solo puede ser comercializado tras 6 años totales de crianza (barrica + botella), habiendo tenido, al menos, 18 meses en barrica. A este nivel solo llegan los vinos de cosechas excepcionales, pues la materia prima ha de ser impecable para resistir un paso por madera tan prolongado.
Existen otras menciones como “Selección de añada”, “Selección de Familia”, “Vino de Autor”, etc, que no están reguladas legalmente, luego pueden ser utilizadas como el elaborador mejor lo entienda, aunque por lo general suelen indicar que son vinos de gamas altas, elaborados con especial cuidado y atención.